La cifra media de afiliaciones a la Seguridad Social en Castilla y León en el mes de febrero de 2011 alcanzó las 903.588 personas, lo que se traduce en una disminución del 1,34% con respecto al año pasado. Este descenso fue común en todas las provincias, con mayor incidencia en Ávila (2,51%), León (1,88%), Segovia (1,52%) y León y Valladolid (ambas con el 1,36%). Por detrás se sitúan las caídas de Zamora (1,14%), Burgos (0,9%), Palencia (0,42%) y Soria (0,32%), según datos de la Dirección General de Estadística.
El 74,02% de las afiliaciones registradas este mes pertenece al Régimen General, con una amplia ventaja sobre los Autónomos, que representaron el 22,77% del total; el Agrario, con el 1,75%; los Empleados del Hogar, con el 1,25%; y la Minería del Carbón, donde sólo se inscribió el 0,21% de los afiliados.
En comparación con febrero de 2010, se produjo un descenso en el régimen Autónomo en todas las provincias; en el régimen General las afiliaciones disminuyeron también en todas las provincias excepto en Palencia (0,39%); en el régimen Agrario aumentó en Burgos (1,71%), Salamanca (3,10%), Soria (16,21%), Valladolid (0,64%) y Zamora (7,87%), disminuyendo en el resto de las provincias; mientras que en el régimen Empleados de Hogar, la afiliación aumentó en Ávila (1,93%), Soria (3,43%), Valladolid (1,98%) y Zamora (0,20%), permaneció constante en Segovia y disminuyó en el resto de las provincias.
Feacyl reclama medidas que incentiven el consumo, no el ahorro
La Federación de Autónomos de Castilla y León (Feacyl), integrada en Cecale, mantiene su visión negativa de los datos de afiliación al Régimen Especial Trabajadores Autónomos (RETA), “a pesar de que la curva de la economía regional, aún en signo negativo, dibuja un trazado ascendente”. Su opinión se basa en la caída del consumo, el descenso de la actividad productiva y las excesivas dificultades para acceder al crédito bancario. Ante esta situación, insistió en exigir a las administraciones un compromiso para desarrollar medidas “que promuevan el consumo, no más ahorro”, de tal forma que se reactive la producción y poco a poco se recupere el tejido de empresarios por cuenta propia en la comunidad autónoma.
La agrupación empresarial consideró fundamental evitar medidas que incrementen las cargas dinerarias de los empresarios autónomos, tales como subidas de impuestos. Además, reiteró la necesidad de que las entidades públicas cumplan con los plazos de pago establecidos por la recientemente modificada Ley de Morosidad.
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