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Calicata, el nuevo restaurante de Abadía Retuerta LeDomaine, abre sus puertas con una apuesta por el producto local de temporada

Su exclusiva carta de vinos de la bodega incluye también otras referencias de prestigio
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De izquierda a derecha, Marc Segarra y Enrique Valero, cocinero y director general de Abadía Retuerta LeDomaine, respectivamente.

Calicata Terroir Bar, el nuevo espacio de Abadía Retuerta Le Domaine, que recientemente ha pasado a formar parte del selecto club de Leading Hotels of the World, se sitúa en el área de la bodega, en un lugar al aire libre rodeado de pinos y viñedos en plena naturaleza, amenizado por la sinfonía de chicharras y de grillos.

Una atractiva decoración donde se cuida hasta el último detalle como marca de la casa, como el cómodo mobiliario y la coqueta vajilla, permiten al comensal añadir un aliciente más a su visita a la bodega, al tiempo que sirve de complemento a la oferta culinaria del hotel de cinco estrellas con sus otros dos restaurantes como son el Refectorio (una estrella Michelin y dos soles Repsol) y la Vinoteca.

Detino de vino y gastronomía

“Se trata de un concepto gastronómico para crear un destino muy de vino y de Castilla y León, para seguir completado la oferta de Abadía Retuerta”, explica Enrique Valero, director general de Abadía Retuerta Le Domaine, quien añade que el propio nombre del local (Calicata) es una metáfora que revela “la mejor variedad de productos de la zona con el vino como estrella, que no pretende competir ni con nuestra propia oferta, ni tampoco con la de la zona”.

Su nombre, Calicata, viene dado por un término técnico muy utilizado entre los enólogos para entender la tierra en la que asientan las viñas. Consiste en la exploración de un terreno mediante una barrena o una sonda para conocer los minerales que contiene.

Productos locales

La materia prima de calidad protagoniza las creaciones del cocinero Marc Segarra, con platos ligeros y divertidos, como una acertada selección de embutidos, con el jamón de La Hoja de Carrasco como estandarte, o de quesos elegidos por Campoveja; o la ensaladilla rusa con huevas de truchas, los garbanzos de Pedrosillano con perdiz escabechada, la ensalada de langostinos de Gambastar, las setas de Soria escabechadas y el gazpacho de remolacha, entre otras creaciones; sin olvidar la presencia de los productos del huerto biodinámico, que ensalza aún más la cocina del laureado chef.

“Queremos que sea un restaurante familiar, con decidido apoyo a los proveedores locales”, explica Segarra, quien apostilla: “será una cocina casera con un toque de originalidad, refrescante y liviana”.

Con un tíquet medio de 35 euros, Calicata aspira a convertirse en una referencia gastronómica de calidad en pleno corazón de la Ribera del Duero, cuya oferta culinaria cada vez es más rica. Calicata Terroir Bar permanecerá abierto durante todo el mes de julio y hasta finales del mes de octubre en horario de jueves a lunes, desde las 12:00 horas hasta las 17:00 horas.

Castilla y León Económica

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