Los economistas y los titulados mercantiles de Valladolid cuentan desde el pasado mes de noviembre con una única voz para defender sus intereses ante las administraciones públicas, las empresas y los ciudadanos: el Colegio Profesional de Economistas de Valladolid.
“La unificación de ambos es importante porque el profesional de la economía juega un papel muy relevante en la sociedad, pues toca tanto los servicios públicos como los privados. No dejamos de ser técnicos, objetivos e imparciales. Además, la economía es necesaria para garantizar el Estado del Bienestar y la calidad de vida de la población”, aseguran Juan Carlos de Margarida y Roberto Gutiérrez, presidente y vicepresidente de la comisión gestora del Colegio Profesional de Economistas de Valladolid, un órgano de gobierno con 2 funciones principales, como son proponer un estatuto profesional y la de convocar elecciones el próximo día 8 de febrero para constituir la nueva Junta Directiva de esta entidad.
El profesional de la economía tiene 3 perfiles, como son el ejerciente libre, que asesora a sociedades públicas y privadas y a los ciudadanos en materia fiscal, laboral, contable, concursal y de auditoría; el de empresa, que vela por la viabilidad de las compañías y, en el caso del sector público, maneja impuestos y presupuestos para que las administraciones proporcionen los servicios básicos a la población; y finalmente el docente, que forma la mente del futuro economista en materia económica para que después el conocimiento adquirido se pueda revertir a la sociedad.
Elaboración de informes
“Ayudamos a través de la elaboración de informes con las variables que existen en el momento de prepararlos a la toma de decisiones de empresarios y políticos. Estos estudios se fundamentan en la situación micro y macroeconómica del período en el que se emiten y si no se toman las decisiones pertinentes con la rapidez oportuna que indican éstos, no se obtienen los resultados esperados y, por lo tanto, habría que volver a replantearlos de nuevo”, explican los representantes del Colegio Profesional de Economistas de Valladolid, que tras esta unión cuenta con más de 1.200 integrantes.
Una profesión joven
A su juicio, la profesión del economista es muy joven en comparación con otras, y la sociedad no la tiene interiorizada, “pero la crisis sí que ha ayudado a ponerla en valor. No en vano, se ha empezado a ver la economía como necesaria, pues es una de las preocupaciones principales para los españoles junto con la política y los deportes, e incluso estas 2 últimas priorizan la economía para lograr sus metas. Además, tiene como objetivo fundamental garantizar, con el ejercicio de su profesión, que las generaciones futuras tengan al menos la misma calidad de vida que la actual”.
Más información en el número de enero de la revista Castilla y León Económica