La Junta de Castilla y León aprobó este jueves en Consejo de Gobierno una inversión de 242.000 euros para el diseño de un nuevo modelo de centros tecnológicos que potencie su competitividad. Esta partida financiará la contratación de los servicios de análisis necesarios para redefinir esta red de entidades y dotarla de más capacidad de investigación, mayor especialización para responder con eficacia a las necesidades de las empresas de Castilla y León y una presencia equilibrada en el territorio.
La Estrategia de Emprendimiento, Innovación y Autónomos 2016-20 de la Junta prevé, dentro del eje de Innovación y en el bloque dedicado a la Transferencia Tecnológica, la articulación de un nuevo modelo de centros tecnológicos que pueda generar los conocimientos básicos en los ámbitos científico y tecnológico que resulten de interés para el tejido productivo autonómico.
El documento señala la necesidad de actualizar la oferta de estas entidades en torno a las tecnologías claves de la Industria 4.0 y a las prioridades temáticas identificadas en la Estrategia Regional de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente de Castilla y León 2014-20 (RIS3).
Especialización
El objetivo último es orientar las capacidades científico-tecnológicas desarrolladas por estos organismos a las demandas del mercado sobre los parámetros de especialización y de impulso a la investigación colaborativa con las empresas e instituciones, de manera que la futura red de centros tecnológicos de la comunidad autónoma mejore su excelencia y se dote de una estructura sólida y con una implantación territorial equilibrada, capaz de dar soporte al ecosistema de innovación autonómico.
Por este motivo, la Consejería de Economía y Hacienda, a través del Instituto para la Competitividad Empresarial (ICE), que tiene atribuidas las competencias de dinamización y apoyo a los centros tecnológicos integrados en la Red de Centros Tecnológicos de Castilla y León (que también son agentes de la Emprendimiento e Innovación), va a proceder a la contratación de un estudio por un importe máximo de licitación de 242.000 euros.
El informe tiene 2 fases. La primera comprenderá un análisis de la situación actual que identifique tanto las capacidades de estos entes y de otros organismos de investigación, como las necesidades tecnológicas sectoriales y empresariales de Castilla y León. La segunda parte planteará el diseño de un nuevo modelo organizativo, incluyendo los aspectos estratégicos y de negocio, así como las implicaciones laborales, legales, administrativas y jurídicas de la estructura propuesta.
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