La cooperativa soriana Copiso cerró 2016 con una facturación de 200 millones y 1.200 socios, según informó Javier Blanco, su presidente, durante la presentación de los actos previstos con motivo de su 50 aniversario. Blanco explicó que se trata de una “fecha significativa para toda la sociedad soriana”, unos años en los que se “ha asentado población y se ha dado un servicio a la provincia”.
Copiso es la primera empresa en facturación de la provincia y cuenta con 115 empleados en la cooperativa y 25 en Icpor, sociedad para integraciones porcinas.
50 años
Blanco dio las gracias a los socios anónimos que “desde sus pueblos han confiado en la cooperativa” y tuvo un reconocimiento para los socios de base que trabajan en la sombra y dejan en herencia “lo que hoy es Copiso”. El presidente subrayó el “impulso tecnológico y de investigación” de las nuevas instalaciones de Valcorba, en las que se invirtió 30 millones de euros y que pusieron a la empresa soriana “en primera línea nacional para transformar productos en pienso”.
Por su parte, Andrés García, director gerente de la cooperativa, hizo un repaso de lo que ha sido Copiso en estos 50 años, con sus “luces y sombras” y destacó la presencia de “2 liderazgos importantes” en su nacimiento, como fueron los de Jesús Borque, primer presidente, y Eusebio Alcalde, primer secretario. Entre los actos de este medio siglo, además de la publicación de un libro resumen, destaca el torneo de guiñote por las comarcas, una comida de hermandad, la asamblea de socios así como un concurso de fotografía.
García, que lleva 41 años en la cooperativa, destacó los 2 primeros años como claves, con un nacimiento en plena dictadura, cuando “Soria se vaciaba y hubo gente dispuesta a quedarse en la provincia”. En febrero de 1967 se creó la primera Junta Rectora y fue en diciembre de ese mismo año cuando se celebró la primera Asamblea General Extraordinaria para elegir a los cargos directivos. Al final de año contaba con 1.200 socios inscritos.
En 1968 se definió el Plan Estratégico de la empresa y comenzó a entrar personal. En la década de los 70 comenzaron las inversiones y en los 80 llegó la etapa de “sombras” en Copiso, con “tensiones internas”. En 1995 se jubiló Alcalde, entonces director, y la Junta Rectora decidió “cambiar la estrategia y devolver la confianza en los socios con un modelo más transparente de gestión” como anotó García.
En ese año nació el Primer Plan Estratégico de Porcino en Soria, una iniciativa que surgió “de una debilidad”, como señaló su actual gerente y que entre 1995 y 2016 “multiplicó por 5 la facturación” de Copiso.
Castilla y León Económica / Europa Press
