Las entidades financieras españolas podrían tardar hasta 45 años en deshacerse de su cartera de suelo, cuyo valor asciende a cerca de 49.000 millones de euros, si se mantiene el actual ritmo de transacciones; y hasta 5 años en drenar su stock de pisos, que supone otros 21.000 millones, según calcula Ángel Berges, consejero delegado de Analistas Financieros Internacionales (AFI).
El suelo copa el 70% de los activos inmobiliarios que actualmente acumulan bancos y cajas en sus balances, mientras que las viviendas representan el 30% restante. Según AFI, el valor total de los “activos atascados” en los balances del sistema financiero español rondan así los 70.000 millones de euros, con datos al cierre del mes de junio.
Durante su intervención en el XXX Coloquio Nacional de la Asociación de Promotores y Constructores de España (APCE), Berges afirmó que, a la vista de estas cifras, “el sector de la construcción y el financiero se han convertido en hermanos de sangre”, puesto que su destino a día de hoy va aparejado. En su opinión, el gran reto al que se enfrentan es a la “movilización” de estos stocks.
Europa Press