Iberdrola invirtió alrededor de 51,5 millones de euros al área de distribución en Castilla y León a lo largo de 2010. Esta cantidad se destinó a la puesta en servicio de 3 nuevas subestaciones en Valladolid -Zambrana-, en León -Venta La Tuerta- y en Soria -La Güera-; la cesión a la compañía de la subestación Peñafiel II, en la localidad vallisoletana del mismo nombre; y la ampliación de las de Benavente (Zamora), Piedrahita (Ávila), Guijuelo e Íñigo (Salamanca) y Molederos (Palencia).
En la actualidad, la empresa está construyendo otras 8 subestaciones, que se pondrán en funcionamiento en el presente ejercicio; Prado Marina y Arauzo, en Burgos; Huerta, en Salamanca; Villabrázaro y Valderrey, en Zamora; Salencias, en León; Bachilleres, en Ávila; y La Encomienda, en Valladolid. Además, está ejecutando 3 nuevas líneas de alta tensión -45 Kilovoltios (kV)-, una de Castronuño a Toro, en Zamora; otra desde Presa Porma a la estación invernal de San Isidro, en León;y la nueva línea Arroyadas-Quintanilla, que abastecerá de energía eléctrica a la zona de Peñafiel, en Valladolid.
La demanda en la región experimentó en 2010 un incremento del 2,9% respecto al ejercicio 2009, con crecimientos en todos los sectores: residencial, de servicios e industrial.
Castilla y León Económica