José Antonio de Santiago-Juárez, consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta, presidió hoy la que previsiblemente será la última reunión del Guardián de la Marca de Castilla y León durante la presente legislatura. En el encuentro se aprobó el reglamento que define el funcionamiento de este órgano colegiado y sienta las bases para el uso de la nueva imagen identificativa de la región por parte de la sociedad civil y el sector empresarial.
Esta jornada de trabajo sirvió también para autorizar el Manual de Identidad de la Marca y para avanzar en la definición de los procedimientos que, a partir de septiembre, habrán de dar continuidad a la fase de difusión, la última etapa de la Estrategia Marca Castilla y León, iniciada en 2007 con las fases de investigación, decisión y creatividad.
Autoestima
El portavoz del Gobierno regional se mostró convencido de que la autoestima debe ser la base de la reputación de Castilla y León. “Hay que avanzar en este sentido, porque nos sobra victimismo y nos falta autoestima; nos falta gustarnos más y saber disfrutar y compartir, en cada provincia, los éxitos de las otras”, argumentó. En este punto, De Santiago-Juárez matizó que la Marca Territorio no tiene como finalidad directa la distribución de productos, sino la creación de una imagen global. “En estos momentos, el principal objetivo es que los ciudadanos de Castilla y León se familiaricen con esta forma de presentar a la comunidad autónoma”, precisó.
El Guardián cuenta con 23 vocales y, además del Ejecutivo autonómico, están representados los grupos parlamentarios de las Cortes de Castilla y León, las universidades públicas, la Federación Regional de Municipios y Provincias, el Consejo Regional de Cámaras de Comercio e Industria, las organizaciones sindicales y empresariales, las organizaciones profesionales agrarias, la Unión Regional de Cooperativas de Castilla y León y el grupo de expertos del programa Las Comunidades Autónomas en el Siglo XXI.
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