La Federación de Autónomos de Castilla y León (Feacyl), integrada en Cecale, alertó de que la comunidad autónoma pierde cada día 10 profesionales por cuenta propia, puesto que según sus datos, diariamente se dan de baja 72 empresarios en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), frente a los 62 que se dan de alta en este registro. Ante esta situación, la organización reclamó “con urgencia” a las administraciones que cumplan con los plazos de pago, que impulsen políticas activas de empleo, que faciliten el acceso a la financiación y que desarrollen una línea ICO específica para autónomos que considere las peculiaridades de este colectivo.
Feacyl insistió en poner como ejemplo de esta tendencia de destrucción del tejido productivo los últimos datos publicados por el Ministerio de Trabajo y correspondientes a las altas y bajas en el RETA, que constatan que a lo largo del mes de noviembre, la región perdió un total de 303 empresarios autónomos (2237 bajas frente a las 1934 altas).
Financiación inaccesible
Entre los factores que han llevado a este contexto negativo para la economía de Castilla y León, destacan la fuerte caída del consumo de las familias y de la demanda de productos y servicios en general, por el clima de desconfianza imperante, así como la intensa disminución en la actividad de las empresas y administraciones públicas. A ello se suma la dificultad de acceso a la financiación, que a juicio de Javier Cepedano, presidente de Feacyl, se traduce en un crédito “prácticamente inaccesible para la pyme y, especialmente para los empresarios autónomos”.
Por ello, esta organización -junto a Cecale- firmará mañana un acuerdo con Iberaval con el objetivo de colaborar en garantizar tanto a las pequeñas y medianas empresas de Castilla y León, como a los autónomos de la comunidad autónoma, el acceso a los fondos con los que puedan financiar su actividad.
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