La cuarta edición del Salón Inmobiliario de Valladolid Sivall facilitó a los promotores formalizar 164 reservas de viviendas, lo que representa el 32,8% de la oferta presentada en la feria. A pesar de que el número de visitantes que acudieron a esta convocatoria (unos 3.200 vallisoletanos) es ligeramente inferior al del año anterior (3.500), los organizadores coincidieron en señalar que en esta ocasión los asistentes acudieron “con una clara intención de compra”.
Durante los tres días que ha durado esta cuarta edición, un total de 19 promotores de la ciudad puso a la venta más de 500 viviendas. A pesar de que la cifra de ventas no llega ni a la mitad, Eleuterio Gordaliza, secretario general de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Valladolid (Aspriva) apuntó que muchas de las consultas (2.679 en total) terminarán por convertirse en contratos de compra “ya que nadie puede aventurarse a firmar sin haber hablado antes de las concisiones hipotecarias”.
En cuanto a las prioridades de los vallisoletanos a la hora de buscar una vivienda, los organizadores comparten la opinión de que el precio se convierte en el factor más importante para el comprador, seguido de la zona y los metros cuadrados. “Son momentos complicados económicamente y es lógico que prime el precio de la vivienda. Hemos cerrado 164 precontratos de compra, lo que supone una tercera parte de la oferta que presentábamos. Estamos muy satisfechos con el resultado”, aseguró Gordaliza.
Condiciones de compra
Los pisos más demandados por los vallisoletanos en esta feria fueron casas de más de tres dormitorios, 90 metros cuadrados y de entre 150.000 y 200.000 euros. En el caso de viviendas unifamiliares, el interés se centró en chalés de más de 100 metros cuadrados, con cuatro dormitorios y precios de entre 200.000 y 400.000 euros.
Cada promotora atendió de media 150 consultas a lo largo de esta cuarta edición, pero no todas las preguntas se ciñeron a las calidades, metros cuadrados u orientaciones. La desaparición de las desgravaciones fiscales por la compra de una vivienda centró las consultas, aunque una gran parte de los asistentes conocía “a la perfección” la nueva normativa y mostraron su inquietud por los inminentes cambios. “Sabemos que muchas de las consultas realizadas se traducirán en futuras compras antes de que finalice el año. Los visitantes se han mostrado preocupados por este tema y más del 90% ha pedido consejo en la feria”, concluyó el secretario general de Aspriva.
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