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Asercomex Logistics gestiona gran parte de la mercancía sanitaria comprada por la Junta en China

La empresa burgalesa de comercio exterior organiza toda la cadena del proceso de importación gracias a su conocimiento del mercado chino
Material sanitario procedente de China gestionado por Asercomex Logistics.
Material sanitario procedente de China gestionado por Asercomex Logistics.

Asercomex Logistics, compañía burgalesa especializada en comercio exterior, ha amortiguado, en buena parte, el golpe provocado por la crisis del coronavirus al compensar la bajada de actividad de sus clientes habituales en más de un 50% -compañías de todo tipo, pero fundamentalmente manufactureras y del sector de automoción- con la gestión del transporte de la mayoría del material sanitario adquirido en China por la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León

El conocimiento del mercado asiático de la empresa dirigida por Ignacio San Millán le permitió organizar toda la cadena del proceso, desde la recogida del material en las fábricas de los proveedores, hasta trasladarla a su centro de operaciones en Shanghai, tramitar las exportaciones, fletar la mercancía en aviones hacia España y, una vez en nuestro país, llevarla a los almacenes de XPO Logistics en Valladolid, desde donde se distribuye a los centros sanitarios castellanos y leoneses. Respecto a esta operación, San Millán destaca que la Junta es la administración “que mejor ha sabido reaccionar ante la pandemia, pues se puso en manos de profesionales con experiencia en el mercado chino que supieron buscar proveedores que cumplían los requisitos de sus productos. Otros no han tenido esta suerte”.

Crecimiento

Asercomex Logistics cerró el ejercicio 2019 con un incremento del 6% en su facturación hasta los 8,9 millones de euros, con un superior aumento en el movimiento de mercancías, pero con una reducción en los márgenes. Sus previsiones al inicio de 2020 apuntaban a un crecimiento del 7% para el presente año y se estaba cumpliendo el pronóstico hasta que llegó la fatídica segunda semana de marzo y con ella el parón de actividad.

El empresario burgalés vaticina que no será hasta el último tramo de 2020, tras el verano, cuando pueda empezar a  recuperarse cierto ritmo en la actividad empresarial. “La travesía del desierto será dura, y eso contando que no haya rebrotes del virus. En nuestro caso, trabajamos mucho en el mercado extra comunitario, y ahora mismo está mal”.

Agroalimentación

Uno de los retos de Asercomex Logistics en el corto plazo será poner el foco en el sector agroalimentario, quizá el que mejor está aguantando la crisis provocada por el Covid-19. “Gracias a nuestras oficinas en Madrid y Valencia, aparte de nuestra sede en Burgos, vamos a tocar los sectores cárnico y hortofrutícola”, explica San Millán.

El empresario, quien asegura que esta pandemia está permitiendo ver “la grandeza humana, pero también las miserias”, señala que esta situación tiene que provocar una reflexión: “No deberíamos tener una dependencia tan grande de China. ¿Qué habría pasado si hubieran sufrido el impacto del virus a la vez que el resto del mundo y no hubieran vendido equipos de protección individual (EPI) al exterior? Habría sido un caos y estaríamos hablando de una cifra de muertos inimaginable. Es necesaria una relocalización. Que muchas empresas puedan volver a instalarse en España, aunque eso implique un necesario aumento de costes que tendríamos que asumir. Entiendo que en nuestro país no se podría fabricar de todo, pero contar al menos con las industrias indispensables”.

Precios disparados

El director general de Asercomex Logistics explica que China es el mayor centro productivo mundial de EPI y todos los países han intentado comprar allí sus materiales, por lo que ha habido incrementos de hasta el 500% en los precios y se han fabricado también auténticas chapuzas en algunos casos. “O tienes buenos contactos y gente de confianza allí para conseguir mercancía de acuerdo a la normativa, o estás perdido. Los fabricantes en China carecen de permisos para exportar, necesitan brokers, apunta San Millán, quien defiende su actividad ante esta dificilísima coyuntura. “Somos una empresa castellana y leonesa que ha tenido que competir con auténticos monstruos de la logística en un mercado tan complicado como el chino. Y el llamamiento a los empresarios es claro: no hay que mirar sólo el euro, sino también el servicio y la cercanía. Se debería tener en cuenta cuando todo esto pase. Somos una compañía de aquí, que generamos trabajo en nuestra tierra y también necesitamos el apoyo de las empresas de nuestro entorno”, concluye.

Más información en el número de junio de la revista Castilla y León Económica

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