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Grupo Cancio diversifica su actividad con una filial especializada en pintura en polvo

Polymetal 21 permite a la empresa vallisoletana controlar uno de sus procesos clave
Instalaciones de Polymetal 21, ubicadas en Santovenia de Pisuerga (Valladolid).
Instalaciones de Polymetal 21, ubicadas en Santovenia de Pisuerga (Valladolid).

Hace algo más de una década, a la empresa familiar vallisoletana Cancio se le presentó la oportunidad de adquirir la instalación del proveedor principal de la firma para el pintado de piezas metálicas. “Pensando en añadir a nuestros procesos uno tan clave como el del acabado de nuestros productos fabricados en acero, incorporamos esta instalación al grupo, pasando a denominarse Polymetal 21, y teniendo como objetivo, aparte de lo anteriormente indicado, diversificar nuestra actividad productiva aprovechando el know how adquirido a lo largo de 60 años de labor industrial”, explica Itziar Peña, gerente de esta división dentro del grupo.

Polymetal 21 se ubica en Santovenia de Pisuerga (Valladolid) y está especializada en la pintura en polvo de cualquier tipo de superficie metálica. Esta moderna instalación forma parte del Grupo Cancio, empresa familiar cuya actividad principal radica en la fabricación de mesas, sillas y taburetes de diseño para la casa y el amueblamiento de colectividades.

En la actualidad, Polymetal 21 factura una cifra cercana al millón de euros y cuenta con una plantilla de entre 8 y 12 trabajadores en función del nivel de actividad. “Contamos con la ventaja de la flexibilidad que aporta disponer de 2 centros de producción y personal altamente experimentado que se adapta a las necesidades de cada una de las fábricas”, señalan sus responsables.

Altos estándares de calidad

En la firma detallan que los altos estándares de calidad que requiere un mercado “tan exigente como el del mueble de alta gama permite a Polymetal 21 ofrecer un nivel de acabado óptimo para cualquier pieza de metal”. El lacado epoxy que trabaja la compañía es un recubrimiento que ofrece “muchas ventajas, como su resistencia a la abrasión y a la corrosión, su durabilidad, su apariencia compacta y fina y por si fuera poco, es a medio plazo una opción más económica que la pintura en líquido. Su impacto ambiental es además muy bajo, pues no emite gases tóxicos”, matiza Peña.

La pintura en polvo está formulada en base a resinas poliéster y epoxy que dan “gran estabilidad” en los colores al paso del tiempo. Es posible aplicar cualquier color de la tabla RAL y en muy diferentes texturas.

Más información en el número de enero de la revista Castilla y León Económica

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