Uno de los hitos en la historia reciente de Enusa ha sido la adjudicación del contrato de suministro de combustible para 2 de las centrales nucleares de Bélgica por parte de la compañía Engie. De este modo, suministra desde Salamanca combustible a 4 del total de 7 reactores nucleares del país, por lo que más del 50% de las necesidades de combustible nuclear en Bélgica se van a suministrar desde la fábrica salmantina de Juzbado.
Roberto González Villegas, director de Desarrollo de Negocio y Tecnología de Enusa, señala que la adjudicación se ha producido “en un proceso de libre competencia, en el que nuestros rivales eran multinacionales mucho más grandes que nuestra organización, lo que constata que somos competitivos en precio, tecnología y servicios. Y ello a pesar de que el sector público en España está sufriendo las consecuencias de la crisis. Además, este contrato nos da estabilidad a largo plazo, lo cual en los momentos que vivimos es un valor añadido muy importante”. Enusa es una de las principales empresas exportadoras de Castilla y León, al destinar un 65% de su producción de combustible nuclear a los mercados exteriores.
La actividad nuclear está ligada indisolublemente a la tecnología y Enusa, desde sus orígenes hace casi medio siglo, ha tenido muy presente esta máxima. De hecho, González Villegas asegura que la apuesta de esta empresa pública por el desarrollo de la tecnología, “nos ha permitido supervivir y progresar en este sector, junto con la internacionalización”. El compromiso de Enusa con la tecnología ha sido un factor diferencial para el desarrollo y crecimiento del negocio de combustible nuclear.
Procesos propios
El ejecutivo incide en esta idea al señalar que esa estrategia “nos ha permitido desarrollar procesos propios y productos basados en esos procesos, lo cual es un aspecto que nos diferencia de otros suministradores. Y a la vez, ese hecho diferencial nos permite abordar mercados internacionales emergentes que no tienen capacidad propia para aplicar el desarrollo tecnológico en sus procesos, como China, Brasil, Argentina, o en un futuro inmediato Turquía o la India”, apunta.
Uno de los pilares estratégicos de Enusa en este ámbito es su apuesta por la I+D+i, área al que ha destinado en los últimos años en torno al 6% de sus ventas y que prevé que en 2017 alcance los 7 millones de euros. Además, un 30% del centenar de personas que trabajan en las áreas de Ingeniería se dedica a esta actividad. “El reto es disponer de la tecnología más innovadora en nuestros equipos y procesos, con el fin de mejorar tanto el producto final que ofrecemos a nuestros clientes, como los niveles de calidad de los procesos y la seguridad de las instalaciones, las personas y el medio ambiente”, precisa González Villegas.
Las líneas de actuación prioritarias son la colaboración en programas internacionales, la investigación básica, el desarrollo de códigos y metodologías, el diseño de equipos para la fabricación de combustible y la inspección del combustible irradiado. “La tecnología requiere una dedicación permanente, y la gente joven que entra en nuestra empresa tiene esa mentalidad”, añade el ejecutivo.
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