Carlos Fernández Carriedo, consejero de Empleo, presidió la Comisión Territorial de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Castilla y León, que desde 2012 ha logrado aflorar 25.313 empleos sumergidos, y en los 11 primeros meses de 2016 detectó 5.029 puestos de trabajo sumergidos.
Durante la reunión, que se realiza con periodicidad anual y que permite la coordinación de la actividad de la inspección de trabajo, se han establecido las actuaciones coordinadas para 2017 en la región. Así, el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y la Consejería de Empleo prevén realizar más de 42.400 acciones de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social dentro del Programa Territorial Integrado de Objetivos para la Acción Inspectora de 2017 en la Castilla y León.
Esta planificación está claramente orientada hacia la calidad en el empleo en ámbitos como el de la erradicación del empleo sumergido o irregular, el control del fraude en la contratación temporal y en el contrato a tiempo parcial, o la firmeza en el control de las actuaciones en materia de prevención de riesgos laborales, con el objetivo de promover la seguridad y salud de los trabajadores.
Impacto económico
Las actuaciones en lucha contra el fraude han tenido en términos globales para el conjunto del Estado un impacto económico de 17.189 millones de euros desde 2012.
La acción firme de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social a favor de la calidad en el empleo en Castilla y León queda constatada con los resultados en materia de transformación de contratos temporales en contratos indefinidos. Desde 2012, se han transformado en la comunidad autónoma 13.456 contratos. En los 11 primeros meses de 2016, el número de acuerdos laborales transformados arroja un resultado de 3.600, experimentando un incremento del 26, % en relación al mismo período del año anterior.
Mejora en la calidad del empleo
Fernández Carriedo subrayó que en materia de contratos temporales, el número de actuaciones programadas para el próximo año asciende a 2.247, frente a las 1.874 en el año 2016, lo que supone un incremento del 19,90%.
Por otra parte, se refuerzan las campañas contra el fraude en la contratación y se realizará un control de la temporalidad en las empresas con carácter general, dado el gran número de contratos que cada año son convertidos en indefinidos, que ascenderá a 1.059 actuaciones, un 7,6 % más que las realizadas en 2016.
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