Antonio Pulido presidente de Banca Cívica, acompañado de José María Leal, presidente de Caja de Burgos; Álvaro Arvelo, su homólogo en Caja Canarias; y junto a Lázaro Cepas y Alberto Pascual, secretarios generales de Cajasol y de Caja Navarra; rubricaron ante notario la segregación de los activos y pasivos de las 4 entidades de ahorro en favor del Banco.
De acuerdo con esta firma, Banca Cívica recibe “los Patrimonios Segregados en bloque y por sucesión universal, subrogándose en la totalidad de derechos, acciones, obligaciones, responsabilidades y cargas vinculadas”, explica a través de un comunicado.
A cambio, las 4 cajas de ahorros reciben acciones de Banca Cívica de nueva emisión mediante los correspondientes aumentos de capital social, de forma que cada caja mantiene la misma participación en el capital del grupo financiero que actualmente ostenta.
Castilla y León Económica