La deuda del Estado en circulación aumentó un 13,9% en 2010, hasta 526.143,6 millones de euros, frente a los 461.996,3 millones registrados en 2009, aunque finalizó el año por debajo de las previsiones iniciales. Así lo anunció Javier Maycas, jefe de la División de Instrumentación de Política Monetaria del Banco de España, en la presentación de la Memoria del Mercado de Deuda Pública correspondiente al año 2010.
En el mercado primario, en 2010 se produjo un cambio de tendencia respecto a los 2 ejercicios anteriores, de modo que la emisión neta se redujo un 45% y alcanzó los 64.147 millones de euros, frente a los 116.881 millones de 2009. Esta situación se produjo como consecuencia del descenso de la necesidad de endeudamiento del Estado, que se situó en 66.052 millones frente a los 116.286 millones del año anterior por las medidas de consolidación fiscal puestas en marcha por el Gobierno. Además, la cifra de emisión neta fue en torno a un 18% menor al volumen previsto.
Durante 2010, la emisión neta de deuda se concentró en la captación de fondos mediante bonos y obligaciones del Estado, por importes de 26.737 millones de euros y 33.831 millones, respectivamente. La emisión neta de letras, en cambio, se cifró solamente en 3.579 millones de euros, lo que ha favorecido que la vida media del saldo de deuda del Estado se alargara muy ligeramente hasta 6,3 años al concluir 2010, frente a los 6,2 años de 2009.
Por las menores necesidades de financiación, la actividad del Tesoro en el mercado primario registró una reducción del 7% en el volumen de colocaciones brutas, que ascendió en 2010 a 207.959 millones, frente a los 222.774 millones del año anterior. Además, el volumen de amortizaciones fue un 36% superior al de 2009. Las líneas que contabilizaron el mayor registro bruto fueron, una vez más, las letras a un año y las obligaciones a diez años. En cuanto a las líneas con mayor emisión neta, destacaron los bonos a tres años y las letras a 18 meses, que se han vuelto a emitir este año.
Sobre la política de emisión del Tesoro, Maycas aseguró que el programa de financiación se ha ejecutado mediante un total de 76 subastas y sus correspondientes segundas vueltas, frente a las 73 celebradas en 2009, así como mediante la colocación por sindicación de 4 referencias.
Mayor coste por la crisis de la deuda
Por su parte, el coste medio de la financiación captada aumentó en 37 puntos básicos influido por la crisis de deuda soberana en Europa, mientras que el diferencial entre la rentabilidad de la referencia española a 10 años y el correspondiente bono alemán fue ampliándose en 2010 hasta cerrar el año en 247 puntos frente a los 67 puntos básicos de 2009.
Según Maycas, de los datos se puede deducir que el Tesoro no tuvo dificultad para colocar la cantidad que requería para cubrir sus necesidades, a pesar de que 2010 ha sido un año caracterizado por la crisis de deuda en Europa y que se han elevado los tipos de financiación, aunque sin experimentar un cambio “sustancial” respecto a 2009.
Según la Memoria, la variación más significativa en las tendencias de letras, bonos y obligaciones fue el aumento de 70.200 millones de euros por parte de los inversores no residentes, que se afianzaron como primer grupo inversor con el 53,4% de las tendencias, 6,9 puntos más.
Europa Press
