Como ya saben, la Fundación Everis presentó recientemente al Rey Juan Carlos I el documento Transforma España, donde se plantean una serie de reformas para aumentar la competitividad aportadas por cien destacadas personalidades del mundo empresarial, entre los que se encuentran algunos de los presidentes de las principales compañías españolas, y académico. En el farragoso texto, más vale que no lo lean a partir de las 23,00 horas para no tener que luchar contra el abatimiento de las pestañas, se incluyen relevantes reflexiones que quiero compartir con ustedes porque se pueden aplicar perfectamente en Castilla y León.
En primer lugar, el informe asegura que España “no es hoy en día un país líder ni en madurez ni en oportunidades … es poco atractivo para empresas, iniciativas, inversiones y talento”. Es decir, no hemos aprovechado estos años de bonanza para situarnos junto a las denominadas Economías del Conocimiento y nos hemos quedado a medio camino, porque tampoco podemos competir como proveedores de bienes y servicios de menos valor por la irrupción de los Estados emergentes. En este escenario global, ¿qué puede hacer Castilla y León para atraer nuevos proyectos si estamos en un país que suscita poco interés para los inversores?
Acercarse al ciudadano
El documento reclama ubicar al ciudadano como “verdadero centro de gravedad del país”, algo en lo que no puedo estar más de acuerdo porque tengo la sensación de que los intereses de los partidos políticos y las iniciativas legislativas, tanto en España como en nuestra comunidad autónoma, cada vez se alejan más de las preocupaciones de la gente. Estos expertos también reclaman, para construir un Estado del Bienestar, “una ruptura de las brechas y asimetrías de información entre, por un lado, quien define y presta los servicios del Estado de Bienestar y, por otro lado, quien los usa y, a menudo sin ser plenamente consciente de ello, financia”. En este sentido, el estudio indica: “imaginad cómo cambiarían las percepciones si en las nóminas viniera el detalle de lo que se retiene del bruto y en qué conceptos, incluyendo la cuota de la seguridad social, o si se indicara en todo servicio público cuánto cuesta y cómo se financia”. Efectivamente, muchos reclamamos que nos faciliten ya facturas sombra de todos los servicios públicos para evitar el derroche, tanto de los gestores como de los usuarios.
Otra frase para el debate: “las subvenciones hacen mirar al poder en lugar de mirar al mercado”. Y razón nos les falta, seguro que alguno tiene en mente alguna empresa que está más atenta a las ayudas que pueda cazar que a la eficiencia de su gestión. Como ven, el informe también arremete contra las malas prácticas de la clase empresarial, a quien recuerda que compiten “en un mercado en el que hay que ganarse el derecho a ser consumido”.
Inteligencia colectiva
Les dejo para el final algunos de los principales problemas de España, y porqué no, de Castilla y León, destacados por la inteligencia colectiva en este interesante trabajo: la falta de una visión y estrategia ambiciosa, consensuada y estable en temáticas de Estado troncales (educación, ciencia, innovación, energía e identidad productiva); la necesidad urgente de flexibilización del mercado laboral; la determinación de cuál es el Estado del Bienestar que los españoles quieren de verdad y pueden permitirse -la cursiva es mía-; la definición del modelo definitivo de descentralización administrativa mejor para España; el debilitamiento y aletargamiento de la sociedad civil que limita su contribución al país; y cierto grado de pérdida de transparencia del sistema y sus instituciones, que provoca una menor confianza en los mismos por parte de los ciudadanos.
Ya no nos podemos quedar de brazos cruzados o esperar a las próximas elecciones generales, porque el plazo para adoptar iniciativas se agota. Como advierte el estudio de la Fundación Everis, “el denominado golpe de estado de los mercados, sencillamente es que los mercados ya se han cansado de gente cortoplacista tomando decisiones para el largo plazo”. Tomamos nota.
Artículo de opinión publicado en el número de enero de la revista Castilla y León Económica
