Los posos del café

Han pasado unos días desde la ya famosa cup of coffee popularizada por Ana Botella y todavía siguen haciéndose chistes sobre el tema. No podría ser de otra manera ya que vivimos en un país que hace del chiste su bandera. Da la impresión de que, como siempre, nos quedamos en la superficie de las cosas y no reflexionamos sobre el fondo de la cuestión.

El inglés es importante, sobre todo a determinados niveles, y su conocimiento y correcto uso puede inclinar la balanza hacia un lado u otro en determinados casos. Pero seamos realistas. La candidatura no la perdió la alcaldesa por su inglés y tampoco el bilingüismo o trilingüismo la hubiera mejorado notablemente. Que es necesario, o si usted prefiere, vital el conocimiento de los idiomas está claro, pero no olvidemos que el lenguaje no es más que el vehículo que transmite la información y que es el contenido lo que realmente cuenta.

Imposible aprobar devaluaciones

En el caso que nos ocupa habría que preguntarse si la estrategia seguida era la correcta. Conociendo el sistema de rotaciones en las designaciones, ¿era el momento? Conociendo los problemas que tuvo Atenas y el desvío en las cuentas de Londres y el enfrentamiento de los ciudadanos brasileños por la celebración de los Juegos y el Mundial de Fútbol, ¿era oportuno que se designara a un país que está recortando salarios y derechos y que tiene a 6 millones de sus ciudadanos en el paro? 

Otro punto es el de la financiación teniendo en cuenta lo elevado de la deuda pública, la posibilidad de un aumento de impuestos para cumplir con el límite de déficit impuesto por Bruselas ¿era creíble la apuesta en términos financieros?  Y, ¿después qué? Ahora no se pueden hacer las devaluaciones que realizó el Gobierno de González tras la Olimpíada de Barcelona, septiembre y noviembre del 92 y mayo del 93. Esta vez no está en nuestras manos. ¿Vendrían más recortes? ¿Más subidas de impuestos? ¿Más bajadas de salarios y pensiones?

Pero hay un detalle que me llama poderosamente la atención. ¿Tenían previsto abonar los seguros sociales de los voluntarios tal y como tienen que hacer ahora las empresas con los becarios? ¿Estaba esa partida incluida en el presupuesto del proyecto? Parece que existen demasiados interrogantes y eso sin tener en cuenta la bondad de los beneficios presupuestados.

Aprender economía

Es muy posible que en el triple fracaso de la designación de Madrid además de influir el inglés, el terrorismo, la crisis, el doping, la corrupción y la falta de peso político de nuestro país, haya influido también la cordura. Los juegos olímpicos, por otra parte, no son exclusivamente deporte, sino que representan la fiesta del deporte, citius, altius, fortius o si lo prefieren más rápido, más alto, más fuerte y las necesidades de España no tienen porqué llevar a unos juegos a la austeridad.

Quizá habría que pensar si además de ponernos en marcha de forma desenfrenada para aprender inglés deberíamos aprender algo de economía, estrategia y finanzas. Esas materias, para muchos oscuras, nos van a acompañar queramos o no a todos a lo largo de nuestras vidas y parece que no existe mucho interés en que nuestros jóvenes y no tan jóvenes las aprendan. Esperemos que no tengamos que mirar a los posos del café para adivinar qué tenemos que decir cuando dominemos el inglés.